Otra derrota de Villa Dálmine con poca mejoría desde lo futbolístico más allá de las modificaciones realizadas por el entrenador como la inclusión de Solís en la mitad de la cancha y el debut de Broggi en la zaga central.

Los dos equipos no generaron situaciones de peligro sobre los arcos, la única que tuvo el «violeta» luego de un primer tiempo donde ninguno  pateo al arco, llegó a los 7 minutos del segundo tiempo en un desborde de Puch que tiró el centro y nadie pudo conectar la pelota que paso por todo el área del equipo «azzurro» que si acertó en un pelotazo largo que logró definir el delantero Torres ante la desesperada salida de Perafán.

A partir de ese momento fue un ida y vuelta interminable con poca claridad sobre los arcos. Sexta derrota consecutiva de Villa Dálmine que comienza a ser preocupante de cara al futuro.